Naturaleza muerta con Jarra y Limones en un plato – Vincent Van Gogh

«Naturaleza muerta con jarra y limones en un plato» (Still Life with a Carafe, Flowers and Fruit, también conocida como Still Life with Lemons on a Plate, 1887) es otra obra fundamental del período parisino de Vincent van Gogh, en la que experimenta con luz, color y composición.

Aquí tienes el contexto completo:

Fecha y lugar

• Fecha: 1887

• Lugar: París, durante su estancia con su hermano Theo van Gogh.

Contexto personal y artístico

• Este período fue crucial para su transformación artística. En París, Van Gogh conoció a artistas impresionistas y neoimpresionistas como Monet, Pissarro, Signac y Seurat.

• Abandonó su paleta oscura holandesa y comenzó a usar colores más brillantes, inspirándose también en los grabados japoneses.

• Hizo muchas naturalezas muertas durante este tiempo para practicar el uso del color, la composición y la luz.

Sobre la pintura

• La obra muestra una jarra de vidrio, un plato con limones y flores, dispuestos sobre una mesa. Es una escena doméstica, simple, pero de gran vitalidad cromática.

• Los objetos no están idealizados; en cambio, están representados con textura visible, pinceladas sueltas y contraste de colores.

• El fondo probablemente sea plano o poco detallado, lo que resalta el primer plano.

Estilo y técnica

• Uso del amarillo, verde, blanco y azul, colores que se vuelven centrales en su obra más adelante.

• Las sombras y reflejos en la jarra de vidrio muestran su interés en capturar los efectos de luz reales.

• Se nota la influencia del impresionismo, pero también su deseo de llevarlo hacia una expresión más personal y emocional, que luego definirá el postimpresionismo.

Naturalezas muertas como laboratorio

• Van Gogh utilizaba estas naturalezas muertas para experimentar: no sólo con el color, sino también con composición, equilibrio visual y textura.

• Pintó muchas escenas similares en este periodo, como “Naturaleza muerta con manzanas, botella y jarra”, o “Naturaleza muerta con cebollas”.

Importancia

• Aunque no es una de sus obras más famosas, esta pintura muestra un momento de transición y exploración artística.

• Revela cómo Van Gogh usaba lo cotidiano para desarrollar una visión única del color y la forma.